Mayores técnicos

Hace poco, vimos con beneplácito la graduación de cerca de tres mil quinientos técnicos de todas las regiones del país, donde el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (INFOTEP), posee un centro de formación. Esto debe llenarnos de esperanza porque esto quiere decir que mucho más son los jóvenes que se están preo­cupando por prepararse que aquellos que buscan una vida fácil bajo la delincuencia o que solo se quedan sin hacer nada más que calibrear motores en el país.

Hay que reconocer que las actuales autoridades han sabido asumir con mucho mayor conciencia la importancia de brindarle a esta sociedad más técnicos, porque de ocho centros que se contaba hace unos años, hoy existen cincuenta y cuatro, y que no solamente nos quedemos con aquellos profesionales tradicionales que son también el resultado de lo que ofrecen nuestras universidades, olvidándose la mayoría de ellos, de que más que: médicos, abogados, ingenieros, arquitectos, entre otros, este país se encuentra necesitado de mayores recursos profesionales en el área técnica que es de cuanto adolecemos.

No fue solamente la cantidad lo que nos llamó poderosamente la atención, sino las áreas innovadoras de las que la mayoría tomó como forma de realización de su formación, entre las cuales se encuentran: robótica, computación en nubes, desarrollo de software y manejo de drones. Sin contar la gran cantidad de técnicos especializados en: electricidad, plomería, electrónica, refrigeración, albañilería, carpintería, peluquería, repostería, panadería y sommelier.

Este tipo de técnicos que hemos mencionado en su mayoría, son los que también se van o se están necesitando en las demandas de los hoteles para el sector del turismo y de las que requieren otras empresas o industrias y hasta en el área doméstica, de cada ciudadano que requiera este tipo de servicios.

Estamos de acuerdo con lo que estableció el periódico El Día, en su editorial del pasado 17 de febrero del año en curso, 2025, cuando indicaba, respecto al tema: ‘Son los 3,500 nuevos agentes de la pujanza y los emprendimientos.

Es, sin dudas, una buena noticia, porque si es cierto que cada año miles de jóvenes exponen su vida y las de otros haciendo zigzag o “calibrando” motocicletas y usando estos vehículos en competencias de velocidad en las vías públicas, también lo es que otros miles se forman de día en día en profesiones técnicas llamadas a convertirse en escalones firmes de su reali­zación social y personal”.

Ojalá esta buena nueva, pueda ser asumida también por las distintas universidades, que no solamente se enfoquen en la parte de profesiones tradicionales, sino que comiencen a mirar con otros ojos, en favor más bien, del país y la necesidad que requiere, que en el interés particular de cada alta casa de estudios, porque de que se requieren mayor cantidad de técnicos, es una realidad.