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Legisladores reclaman un plan integral para rescatar los ríos del país

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Santo Domingo. – Tras la publicación de un reportaje especial en un medio de circulación nacional que evidencia la degradación de varios ríos en la República Dominicana, legisladores de distintos partidos advirtieron que el maltrato a las fuentes acuíferas responde a la falta de un plan integral y sostenido para su recuperación.

Los congresistas Llaniris Espinal, Jorge Távarez y Dagoberto Rodríguez coincidieron en que, aunque se han implementado diversos proyectos medioambientales, ninguno ha priorizado el rescate de los ríos, cuya pérdida de caudal afecta tanto el medio ambiente como la economía rural.

Deforestación y abandono estatal

La diputada Llaniris Espinal, vicepresidenta de la Comisión Permanente de Medio Ambiente de la Cámara Baja, señaló que la deforestación, el conuquismo y la ganadería irresponsable han degradado las cuencas altas, donde nacen muchas de las principales fuentes de agua del país.

“El impacto ambiental en esas zonas no solo amenaza la producción de agua, sino también la estabilidad económica de cientos de familias rurales que se ven obligadas a abandonar sus tierras por falta de políticas públicas que impulsen una agricultura sostenible”, advirtió Espinal.

Propuso que el Estado asuma un rol más activo mediante la compra o adopción de terrenos en áreas montañosas para destinarlos exclusivamente a la reforestación y conservación de cuencas, garantizando así agua limpia para el consumo humano.

Falta de plantas de tratamiento y servicios básicos

De su lado, el diputado Jorge Távarez, de la Fuerza del Pueblo, afirmó que el deterioro ambiental también se refleja en la ausencia de plantas de tratamiento y sistemas de alcantarillado pluvial, lo que provoca que aguas residuales sean vertidas directamente a los ríos sin ningún tipo de manejo.

En el caso de su provincia, La Altagracia, explicó que la contaminación se extiende incluso a los acuíferos subterráneos, ante la falta de infraestructura para filtrar y tratar aguas residuales.

“Mientras las comunidades no cuenten con los servicios básicos necesarios, el daño a los ríos y al subsuelo continuará agravándose”, advirtió el legislador.

El reportaje citado destaca que la mayoría de los ríos observados presentan una problemática común: vertederos cercanos, basura arrojada directamente al cauce y caudales contaminados, reflejo de una crisis ambiental estructural.

Extracción de agregados y erosión

El senador Dagoberto Rodríguez, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), sostuvo que el deterioro de los ríos se ha intensificado por la extracción de agregados y la deforestación en las cuencas altas, lo que genera erosión y arrastre de sedimentos durante las lluvias.

Indicó que el Ministerio de Medio Ambiente, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) y las corporaciones de acueducto deben unificar esfuerzos para proteger los ríos y reforestar las zonas afectadas.

“La pérdida de vegetación está afectando la capacidad de filtración del suelo, generando crecidas repentinas y reduciendo la retención natural del agua”, alertó Rodríguez.

El senador de Independencia agregó que el Estado debe reforzar la supervisión ambiental y promover el uso de canteras secas, evitando la extracción de materiales de los cauces activos, una práctica que calificó como nociva para los ecosistemas.

Riesgo para la seguridad hídrica

En conjunto, los legisladores coincidieron en que, sin un plan integral y una actuación firme de las autoridades, los ríos del país seguirán degradándose, poniendo en riesgo la seguridad hídrica nacional y el equilibrio ambiental de las cuencas que sustentan la vida agrícola y urbana en la República Dominicana.

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