Neymar, jugador de la selección brasileña y del Al Hilal saudí, fue sometido este jueves a una «exitosa» cirugía en la rodilla izquierda para tratar la ruptura del ligamento cruzado anterior y de menisco que sufrió en un partido de la Canarinha contra Uruguay, informaron sus médicos.
«Quedamos muy satisfechos con los resultados. Fue un éxito. Él debe permanecer en el hospital por 24 o 48 horas dependiendo de su evolución clínica», afirmó el médico de la selección brasileña, Rodrigo Lasmar, responsable por la cirugía, en un breve pronunciamiento que hizo varias horas después del procedimiento.
El especialista agregó que el «próximo paso es la rehabilitación con fisioterapia» y, sobre su proceso de recuperación y el tiempo necesario para su regreso a las canchas, se limitó a decir que pretende «divulgar gradualmente nuevas informaciones».
La operación del exjugador de clubes como Barcelona y PSG se extendió por cerca de cuatro horas, hasta el final de la mañana de este jueves, y, pese a que Lasmar no dio ningún detalle, los especialistas consideran que su recuperación puede exigir cerca de ocho meses, lo que amenaza su participación en la Copa América de 2024.
La operación del futbolista de 31 años fue realizada por un equipo encabezado por Lasmar, el jefe del equipo médico de la selección brasileña, en el Hospital Mater Dei de la ciudad brasileña de Belo Horizonte, y contó con la presencia del director médico del Al Hilal, el colombiano Juan David Peña Duque.
Neymar fue sometido a «un procedimiento quirúrgico para la corrección de sus lesiones en la rodilla izquierda; se le reconstruyó el ligamento cruzado anterior y se le repararon las lesiones de los dos meniscos», explicó el especialista.
La estrella de la selección brasileña ingresó al hospital en la noche del miércoles y en la mañana de este jueves publicó en sus redes sociales una fotografía en la que aparece durmiendo con sus dos hijos, Davi Lucca, de 10 años, y la recién nacida Mavie, y en la que dice confiar en que «todo va a salir bien».
Neymar fue operado dos semanas después de la lesión fortuita que sufrió poco antes de terminar el primer tiempo del partido del 17 de octubre en que Brasil perdió por 1-0 en su visita a Uruguay por la cuarta jornada de las eliminatorias sudamericanas.
El brasileño, que no ocultó las lágrimas por la lesión, tuvo que ser retirado de la cancha en una camilla y abandonar el estadio con la ayuda de muletas.
Pese a que los dirigentes del Al Hilal le pidieron que viajara a París para someterse a la operación en la capital francesa, Neymar prefirió regresar a Brasil y convenció a los dirigentes del club de que la cirugía fuera realizada por Lasmar, un médico de su confianza.
El médico de la selección brasileña ya lo operó en otras dos oportunidades, la primera de las cuales en 2018 para tratarle una fractura en el pié izquierdo y la última en febrero de este año para tratar una lesión en los ligamentos del tobillo derecho.
En caso de que se confirme que estará de baja por ocho meses, será el mayor período de inactividad del futbolista de 31 años, por encima de los seis meses en que estuvo alejado de las canchas este año, entre febrero y agosto, tras ser operado en el tobillo.
Neymar fue anunciado como el principal refuerzo del Al Hilal en agosto pasado y hasta ahora solo ha disputado cinco partidos con el club saudí, en los que cuenta con una única anotación.
La ruptura del ligamento cruzado anterior y del menisco se une a la serie de lesiones que el mundialista ha sufrido desde 2020 y que lo han dejado alejado de las canchas al menos 400 días.
