El obispo auxiliar de Santiago, monseñor Carlos Tomas Morel Diplan exhorta a valorar la institucionalidad y el esfuerzo de muchos hombres y mujeres, el aporte que hacen a la sociedad para crear empleo y dar un buen servicio, porque Santiago ha crecido con el esfuerzo de muchos empresarios.
En ese sentido a advirtió ayer que cuando el individualismo y el egoísmo van creando mucho espacio y raíces en la sociedad afecta el sostén y el crecimiento de una nación.
Al presidir la eucaristía con motivo de la celebración de los 75 años de fundación de la ferretería Bellón, dijo que hay que preocuparse por fortalecer la familia para el bienestar colectivo, porque donde hay familia estable se tienen buenos empleados, hombres y mujeres que brindan un buen servicio.
“Ustedes los que han trabajado en la empresa y los que conocen la historia plenamente de 75 años, me imagino todo el esfuerzo que se ha hecho, para colocarlo en el sitial que hoy están, el cual no llegó por casualidad”, expresó.
El religioso sostuvo que los años de esta institución son un ejemplo que se envía a la sociedad, porque nada llega por casualidad, ni un simple capricho humano, sino que se es el fruto del trabajo y la lucha constante que ha dado los resultados que hoy los sueños celebran.
Dijo que la lectura de la eucaristía, habla de un elemento muy importante que es la familia y esta empresa es una familia donde se pone de manifiesto el principio de los fundadores, quienes con visión y una idea clara, porque el éxito de una institución tiene mucho que ver con la familia, porque nadie tiene éxito solo.
Aseguró que al cumplir estos 75 años la ferretería Bellón, no podría tener éxito y los logros alcanzados, sino pone de por medio la gratitud factor importante para impulsar el desarrollo y tener éxito, como ha ocurrido con esta empresa.
“Decir cuanta gente han trabajado, cuanto esfuerzo ha habido, porque hemos logrado mucho, pero detrás de todo eso está la inteligencia, sabiduría, la fortaleza y la visión que solamente Dios les da al ser humano para mirar más allá de lo común”, subrayó.
Afirmó que esto 75 años significan una historia de trabajo, esfuerzo y de servicio, porque Dios siempre ha estado ahí, gracia a lo cual ha dado todo ese aporte a la sociedad dominicana y muy particularmente a Santiago, que ha visto el crecimiento de esa institución.
El oficio religioso tuvo lugar en la Catedral Santiago Apóstol, donde además de los ejecutivos y empleados de la empresa estuvieron presentes también otros empresarios e invitados especiales.