La Policía Nacional y el Ministerio Público calificaron el asesinato de varias personas en Higüey desatado por crimen pasional.
Las autoridades revelaron ayer que inicialmente los hechos tuvieron una motivación amorosa, en virtud de que Angélica Acosta, primera en ser baleada por su expareja Ángelo Santana, se resistía volver a juntarse con el asesino, quien llegó a matar a seis y herir a nueve antes de ser acribillado a tiros por una patrulla policial.
Al conversar con este medio, el fiscal que lleva las investigaciones del hecho, Roberto de los Santos Pacheco, afirmó que el homicida había estado recluido en un Centro de Hogares Crea por adicción a las drogas.
“Manejamos la información de que Ángelo estuvo recluido en un centro de recuperación y de personas por consumo de drogas, pero llegó a recuperar y hacer vida normal en la sociedad higüeyana”, expresó. Sin embargo, manifestó que a pesar de estar bien posicionado económicamente, era una persona desordenada, que para cometer la acción criminal utilizó una pistola que estaba vencida desde hace dos años.
Aseguró que a medida que avancen las investigaciones, el caso podría ser procesado en los tribunales, aunque el autor material del suceso fue ultimado a balazos.