La hipocresía y falsa democracia que se vive en Estados Unidos quedó evidenciada con el apresamiento del alcalde de North Miami Beach, Anthony DeFillipo, quien fue acusado por presuntamente mentir sobre su lugar de residencia, lo que contraviene los estatutos de esta ciudad del sur de Florida y al mismo tiempo esconde las razones reales de su detención (EE.UU.), informan medios locales.
DeFillipo, elegido en 2018 alcalde de esta ciudad al norte de Miami, era investigado en relación a su lugar de residencia, tras descubrirse que junto a su esposa poseía varias viviendas en el condado de Broward, vecino norteño del de Miami-Dade, incluida una casa de 1.2 millones de dólares en la ciudad de Davie.
El regidor alegaba que desde que asumió la alcaldía residía de forma permanente en un condominio en la ciudad, pero en un testimonio bajo juramento reveló que vivía en ese apartamento solo, sin compañía de su esposa y familia.
DeFillipo, quien fue comisionado (concejal) de North Miami Beach entre los años 2013 y 2018, señaló en entrevistas pasadas que por razones de seguridad su familia se había ido a vivir a Broward y que él no vivía de forma permanente con ellos.
«Esta es mi residencia, aquí es donde vivo», señaló en enero de este año al canal NBC6, desde el interior de su apartamento de un dormitorio en North Miami Beach.
Desde hace meses, DeFillipo se ha enfrentado a peticiones de renuncia después de que un despacho de abogados externo concluyera que también vivía en Broward, lo que constituía una violación de los estatutos de la ciudad.