El mundo del hockey sobre hielo sigue conmocionado tras la muerte de Adam Johnson, un jugador estadounidense de 29 años, que después de sufrir un corte en el cuello con la cuchilla de un patín, el sábado, durante un partido entre su equipo, los Nottingham Panthers, y los Sheffield Steelers por la Copa Challenge de la Elite Ice Hockey League del Reino Unido.
Johnson sufrió un corte en la garganta cuando chocó contra un rival. «El jugador del Sheffield cayó al suelo y su patín se levantó y le cortó la garganta al otro jugador. Nunca había visto esa cantidad de sangre salir de nadie a ningún ritmo. Es una de las cosas más espantosas que he visto en un evento deportivo.
En un video que circula por las redes sociales, se puede como Johnson se levanta de nuevo tras el choque e intenta patinar antes de desplomarse después de dar unos pasos. Posteriormente pudo retirarse de la pista, ayudado por un compañero, mientras le brotaba sangre del cuello. Fue atendido rápidamente y luego trasladado en estado grave al Hospital General del Norte de Sheffield. Sin embargo, los médicos no pudieron salvarle la vida.
La Policía de South Yorkshire, que fue llamada al Utilita Arena de Sheffield tras el suceso, abrió una investigación sobre el caso. «Animamos al público a evitar especulaciones sobre el incidente mientras continuamos nuestras investigaciones», anunciaron las fuerzas del orden.
Debate acerca de la necesidad de medidas de seguridad
En tanto, el fallecimiento del jugador abrió un debate en el hockey sobre hielo acerca de la necesidad de llevar protectores en el cuello. A pesar de las numerosas opciones disponibles, los jugadores de la NHL norteamericana se han mostrado reacios a adoptar este tipo de protección.
Si bien estas medidas son obligatorias en algunas ligas juveniles, las supersticiones y la incomodidad de usar equipo adicional han disuadido a muchos jugadores de la NHL de adoptarlas. Además, la creencia predominante ha sido que los protectores de cuello no se alinean con la imagen ‘cool’ del juego, según recogió el portal especializado
«Es una liga de monos que repiten lo que ven. Solo sería necesario que alguien lo usara. Y luego a los dos días la gente ya se habría acostumbrado», afirmó al respecto un gerente de equipamiento de la NHL
